lacucharaquelamenea

Esta frase popular lleva a pensar en la discreción, la confidencialidad y también en la concentración, el hacerse cargo, el protagonismo.

Meterse en lo que los demás hacen, cuando no se lo conoce, no se sabe, no se tienen suficientes datos, es no validar su hacer .

Juzgar las actitudes, comportamientos, decisiones ajenas  no es caritativo, y tampoco habla bien de quien juzga.

No cuidar la información que otros han puesto a disposición desde su rol de pacientes, usuarios, consultantes y amigos, es violar su derecho a mantener el secreto.

También distraerse en los asuntos ajenos, involucrarse en los objetivos de otros, puede ser perder la conecntración, la intencionalidad, el hacerse cargo de los propios.

Ocuparse de las propias cosas y liberar a los demás para que hagan lo mismo, es apostar a la libertad y construir desde el respeto.

Y colaborará en lograr más rápido objetivos y en establecer relaciones más fluidas y armónicas.

¡Hasta la próxima!

Andrea

 

 

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