La oportunidad de ser valiente como correlato posible del miedo, como articula en este párrafo de su obra «Juego de Tronos», George R.R.Martin, abre espacios de pensamiento muy interesantes.
Se suele vivir el temor como un estímulo a correr. A salir corriendo para huir, o a avanzar rápidamente hacia adelante para, acaso también, escapar de la situación.
También se lo suele experimentar a través de inmovilizarse, sentirse inhabilitado, no saber qué o cómo hacer.
¿Qué ocurre si se opta por ser valiente? ¿Se encontrarán otros recursos, otras ganas, otros modos?
Probablemente se podría discutir qué es tomar valor y hacer ejercicio del mismo, aunque ciertamente está relacionado, en la literatura y las películas como en la vida, con el protagonismo, el hacerse cargo, el tomar el toro por las astas.
Decidir que se será valeroso es, al menos, abrir posibilidades, generar preguntas, plantear opciones, planificar acciones.
Buscar respuestas, construir salidas.
Y para ello no se necesita no sentir miedo. Aún sintiéndolo se puede ser valiente.
¡Hasta la próxima!
Andrea
A partir de una frase 